La fiesta en la región Cusco es un gran homenaje a Machu Picchu por los cien años de su presentación al mundo y hoy llego a su punto más alto.
Se realizarán dos importantes actividades: antes del medio día se llevará a cabo la ceremonia del Tinkay, que rinde homenaje a los apus (cerros), considerados los guardianes del pueblo. A las 6 de la tarde, los miles de turistas naciones y extranjeros, así como sus autoridades, serán testigos del espectáculo de luz y sonido, ideado por el director de cine Luis Llosa. La puesta en escena recreará cómo se construyó esta ciudadela inca y quiénes la habitaron.
“Es un espectáculo en vivo que va a combinar escenificaciones con apoyo audiovisual. Cientos de personas participarán en este homenaje al Cusco, en el que contaremos la historia de cómo se construyó Machu Picchu”, precisó el cineasta.
En toda fiesta son importantes los invitados y a ellos hay que tratarlos como si estuvieran en su casa. Por eso, los miles de turistas nacionales y extranjeros se vieron agasajados cuando llegaron a suelo cusqueño a través del aeropuerto Teniente Alejandro Velasco Astete. Ellos fueron recibidos con danzas típicas y discos compactos (CD) sobre Machu Picchu.
En medio de danzas, ilustres cusqueños e investigadores, algunos ya extintos, que han aportado con el estudio y preservación del santuario incaico de Machu Picchu, fueron condecorados con la medalla Centenario de Machu Picchu y placas conmemorativas.
Se reconoció a los antropólogos Jorge Flores Ochoa y Fernando Astete Victoria, a los historiadores Víctor Angles Vargas y Mariana Mould de Pease. Los familiares de Agustín Lizárraga, descubridor de Machu Picchu el 14 de julio de 1902; de Toribio Recharte, y del fotógrafo Martín Chambi, entre otros, recibieron condecoraciones póstumas.
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